En un principio ser tu propio jefe te resultará muy atractivo, pero según vayas siendo consciente de la responsabilidad que tiene, te darás cuenta de que es muy complicado. Por eso te vamos a ayudar con estos consejos ser tu propio jefe.

1. Oblígate a cumplir un horario, pero oblígate de verdad. No sirve que digas que vas a empezar a trabajar a las 8:00 y por la mañana lo retrases porque justo ayer te acostaste tarde. Tienes que ser lo más inflexible posible contigo mismo, ya que de por sí solo ya estás haciendo “lo que quieres”.

2. Ten claros cuáles son tus objetivos. Establece una meta final, que aunque seguramente vaya variando con el tiempo, para poder ser tu propio jefe debes estar seguro de qué es lo que quieres y cómo lo quieres.

3. No solo te centres en el objetivo final, fija pequeñas metas diarias. Así cuando acabes tu trabajo de cada día podrás dormir tranquilo sin pensar en lo que aún te queda por hacer para llegar al objetivo.

4. Respecto al punto anterior, “no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy”. Es decir, si puedes continuar trabajo porque has terminado antes la tarea diaria, eso que avanzas Es mejor ir sobrado de tiempo ante los objetivos por si surgen improvistos.

5. Aprende a delegar. Cuando puedas permitírtelo, contrata a otra persona para que te ayude con tus tareas. No debes tener miedo en que otra persona se ocupe de parte de tu trabajo, si sabes elegir bien al candidato.